La cavitación ultrasónica es un método para moldear el cuerpo y está especialmente indicado para reducir los llamados "depósitos de grasa o lonjitas" en caso de que estos no desaparezcan con dietas y ejercicio.
Tras aplicar un gel conducto, se aplica el aparato de Cavitación, que ayuda a disolver la grasa localizada y reafirma los tejidos. Se aplica en las zonas con mayor cantidad de grasa
El número de sesiones varía según las necesidades y objetivos de cada persona, aunque por lo general se aplican 10 sesiones, dos sesión por semana.